Minibiografia del TROLEBÚS Por Choluis

El grupo de rock Trolebús tuvo su origen en la ciudad de México a mediados de la década de los ochentas. Su primera aparición fue justo 2 meses después del terremoto de 1985, en un acto en la explanada del Museo de Antropología de apoyo a los damnificados del sismo.

Trolebús surge de una curiosa combinación entre tres jóvenes músicos del norte de la ciudad: el “Pato”(quien actualmente es el guitarrista de la Maldita Vecindad), Fernando y Felipe, ex integrantes del grupo Abyssum y dos músicos del sur: Choluis y Demex (quien actualmente toca en Pechos Privilegiados y Radio Blues), ex integrantes del grupo Labios Azules.

Recuerdo que en ese periodo post-terremoto era notorio un ambiente de “reconstrucción" en todos los sentidos, no sólo en relación a los edificios derrumbados sino también en el aspecto anímico. Había que poner de pie la ciudad en términos simbólicos. Antes del temblor ya había graves problemas. El terremoto fue la puntilla y muchos sentimos entonces que de verdad el país se nos venía abajo.

Sufríamos una crisis económica que estalló a principios de los 80, para hacerse crónica en nuestro país. En 1984 hizo explosión una planta de gas en San Juanico Ixhuatepec al norte de la ciudad, ocasionando cientos de víctimas. Además, había un ambiente político bastante agitado, ya que bajo el eslogan electorero del gobierno de entonces “Por una sociedad igualitaria”, lo que en realidad vivíamos era justo lo contrario. Desigualdades cada vez más acentuadas entre la población mexicana.

En esos día yo conocí al “Pato” Montes en el taller de letras y canciones que coordinaba Roberto Gonzáles (y poco después Roberto Ponce) en el Museo del Chopo. Los dos estábamos muy prendidos con los trabajos que estaban surgiendo en el ámbito de la música independiente de la ciudad. En específico de dos géneros: Canto Nuevo y el Rock Mexicano. Además de escuchar, comentar e intercambiar las rolas de artistas como Jaime López, Rockdrigo, Arturo Meza, Rafael Catana, Alejandro Lora, Marcial Alejandro, Emilia Almazán, Roberto González, Real de Catorce, Botellita de Jerez, Mama-Z, etc. El Pato y yo hacíamos canciones, al igual que los demás chavos del taller del Chopo. Los dos teníamos nuestros respectivos grupos. En 1984 mi grupo tronó, mientras que al grupo del Pato le hacía falta un baterista. Así que el Demex, quien tocaba conmigo, se incorporó a su grupo y poco después el Pato me invitó también a entrar.

El 19 de noviembre de 1985 sacamos a circular sin permiso vehicular y en sentido contrario el primer trolebús dedicado no a transportar pasajeros a través de los ejes viales, sino a viajar con ellos por los caminos de la música. Este trole se ensambló con los restos de chatarra mental acumulada en los años 80’s en una ciudad sacudida por los terremotos, explosiones de gas, fraudes electorales, mundiales de futbol, movimientos estudiantiles, canciones rupestres y otras tantas circunstancias que nos empujaron a armar las rolas más desenfadadas que nuestros tambores, guitarras y alaridos podían sonar.

La primera versión del Trolebús estaba compuesta por Enrique Montes “Pato” (guitarra y voz), Fernando Moreno (guitarra y voz), Felipe Moreno (Bajo), Choluis (guitarra acústica y voz) y Demex (batería). El nombre de “Trolebús” se debe a que en nuestros inicios, para poder ensayar, teníamos conectado un cable al tendido de luz del alumbrado público. De esta forma obteníamos el suministro eléctrico para hacer sonar nuestros instrumentos. Más tarde nos inventamos la idea de que el grupo constituía un sistema de transporte de emociones colectivas. El primer disco “Trolebús en Sentido Contrario” (1987) fue nuestra tarjeta de presentación y casi de inmediato el grupo fue clasificado como exponente del rock urbano, por sus temáticas cotidianas y su sonido cercano al blues, al rocanrol y a la canción rupestre. La difusión que en los años 80 tuvieron algunas canciones de este disco (“Barata y descontón”, “Balada chilanga”, “País de los borrachos”, “Plegaria”, etc.) a través de las emisoras “Radio Educación” y “Espacio 59” (y más tarde en “Estéreo Joven” y “Radio Mexiquense”), colocaron a Trolebús en el gusto de un gran numero de seguidores de rock mexicano de la ciudad de México y sus alrededores.

A mediados de 1988 sufrimos nuestro primer apagón y el trole se quedó parado en el taller durante dos años. En la década de los noventa resurgió el Trolebús con una nueva formación: Choluis (guitarra y voz), Demex (batería), Mao (guitarra) y Miguel Ordoñez (bajo). El sonido del Trolebús experimenta un cambio drástico como resultado de los nuevos integrantes del grupo. Con esta alineación ofrecimos varios conciertos en provincia y dimos a conocer dos grabaciones “Urbanicidio” (1992) y “Días Oxidados” (1993). Como dato curioso, a inicios de los noventas Trolebús fue el primer grupo de rock mexicano en recibir una descalificación por parte del Arzobispado de la ciudad de México a través de su portavoz, quien hizo un llamado a la juventud para que se abstuviera de escuchar la música de este grupo.

En 1994 Miguel Ordoñez deja el grupo y en Trolebús emprendimos una nueva ruta ahora como trío, formado por Choluis (bajo y voz), Demex (batería) y Mao (guitarra). Con esta hechura participamos activamente en los conciertos de solidaridad por Chiapas organizados por el colectivo “Serpiente Sobre Ruedas” y en 1995 grabamos nuestro cuarto disco “Delirium Trolems”.

En julio de 1999 yo dejé el grupo porque me fui a estudiar un doctorado en Sevilla, España. Mientras tanto el Mao y Demex incorporaron a Luis Cáceres “El Pollo” al bajo y desfilaron algunos vocalistas como Edmundo, el “Cavern”, el “Alsex” y Juan. Con Alsex lanzaron en el 2000 el quinto y último disco del Trolebús titulado “La Alcantarilla”. Ese mismo año ocurre el segundo apagón del trole y tras unos chispazos todos huyen en desbandada para no electrocutarse.

Casi siete años después, reaparecimos inesperadamente como Trolebús a finales del 2007 con nuestra 2ª formación y prácticamente todos cuarenteando, pero rebosantes de música y con ganas de iniciar otra ruta en el presente siglo XXI. El primero de diciembre de 2007, dimos una tocada ante la banda del Tianguis Cultural del Chopo. Lo que en un principio parecía ser un ejercicio de nostalgia ochentera se convirtió en todo un acontecimiento emotivo. Un montón de chavos y chavas, sobre todo de nuevas generaciones, corearon todo el concierto y por todos lados apuntaban cámaras, celulares y grabadoras de video para registrar el momento. Luego de la tocada, los cuatro troles estuvimos dos hora firmando autógrafos, discos, camisetas, fotos y hasta guitarras de palo. Sin duda hubo conexión con la banda.

A través de este blog te invitamos a dar un rol, rocanrodando desde la gran Ciudad de México hacia el mundo.